Características
Los efectos positivos de incluir el calabacín en la dieta de verano son los siguientes:
- Fácil de digerir en función del tipo de cocción: se trata de una hortaliza que tiene una digestión rápida y fácil, siempre que se cocine de manera suave (al vapor, escaldada o incluso cruda).
Si la freímos o la cocemos a la brasa, a parte de eliminar completamente las vitaminas hidrosolubles (la C y las del grupo B), corremos el riesgo de generar acrilamides, que son substancias cancerígenas.
- Tiene propiedades diureticas: Es un alimento rico en potasio y pobre en sodio que confiere una acción diuretica que afavorece la eliminación del exceso de líquidos del organismo. Es beneficioso en caso de hipertensión, hiperuricemia, GOTA y cálculos renales, o en caso de retención de líquidos o oligúria (producción escasa de orina).
- Contiene luteïna, que tiene efectos beneficiosos para la vista: El calabacín es una de las hortalizas con más cantidad de luteina. Esta substancia es un tipo de pigmento que hay en la retina, donde tiene la función principal de proteger las células receptoras de la degeneración macular asociada al envejecimiento. Algunos estudios demuestran que consumir hortalizas ricas en luteina puede reducir el risco de cataratas y degeneración macular.
- Los mucílagos de las semillas contienen fibra muy saludables: Esta fibra suaviza y desinflama las mucosas del aparato digestivo y tiene numerosos efectos beneficiosos: por un lado previene o mejora el estreñimiento, por la otra contribuye a reducir la tasa de colesterol en la sangre y a controlar la glucémia, y finalmente tiene efectos prebióticos que afavorecen la flora intestinal.